domingo

Qué perfectas que son las cosas con el tiempo.
Qué hermoso que fue esa sola tarde,
Las lágrimas saladas
la niña guardándolas en su boca.

Se contamina el presente de autores,
ruidos que ensordecen, nubes de humo,
el pasado está lleno de recuerdos
que se vuelven preciosos...

Qué intactos parecen tus besos del principio,
deliran mis fantasmas, inventan
otros besos, más-o-menos parecidos,
a tus besos de ayer...

Tan distintos de tus besos de hoy, son
esos besos del pasado, transformados,
pulidos por el tiempo y a lo lejos va quedando
un beso único, que llora.

Pero las lágrimas pasadas también son bellas.
Cuán perfecto es que llorara sola en el pasillo,
cuán exacto que nunca volviste por ella...
Escribió su libreto con tinta transparente.

Cuando te esperaba y no viniste,
cuando viniste y yo no estaba.
Errores del tiempo que él mismo
se encarga de corregir,

El pasado brilla y me ilusiona,
me llora y mi dolor todavía no vino.
El pasado intacto, artista de las cosas,
deformador de recuerdos,
dejalo así que te quedó precioso,
aquellos eran tan buenos tiempos,
y el presente te consume,
y el pasado se divierte.